"EL NOTARIO Y EL CALCETIN "

" ¿Como puedes ser tan ganso,Juan? "



No soy virtuoso,todo es relativo. Me refiero a que no tengo término medio y parece ser que las lenguas que se alimentan de refranes indican que en el término medio está la virtud. A estas alturas no se si se refieren a la panadera del pueblo y a su domicilio conyugal, o al dominio de las circunstancias y ejecución impecable de tus actos.Si se refieren a esta segunda opción entonces son unos asesinos.


Si soy un tipo profundamente despistado.A veces es como si viviera en otro mundo,posiblemente en Piskuetolandia. Mi dualidad de personalidad se convierte en triunvirato en un abrir y cerrar de puertas(minuto de silencio,por favor).


Es cierto que mis valores son cuestionables,en la misma proporción que lo son los tuyos. También es real el Madrid.


Mis principios esenciales son estrictos y rígidos cuando no los cambio.Esto es de mi querido Letto,juas,juas,eso es de Greg.Crack.


Me diluyo,perdonen me.


Hubo una vez ,hace mucho tiempo,que decidimos visitar a un notario o algo así. Era motivado por las circunstancias,era necesario para unos asuntillos de familia de los que no recuerdo bien los detalles,de eso se encargará mi madre cuando lea esto.


El caso es que debíamos asistir todos "de punta en blanco" a la sede central del banco,situada en la Castellana o colindante,tampoco recuerdo,por que son detalles que dejo para los mas curiosos yo soy un despistado.


Allí nos esperaban los directivos de no se que cargo.Como veis soy un detallista empedernido.


Todos eran hombres de bien,importantes.Si medimos la importancia por el coste del traje.


Yo me levanté aturdido,"cansao",como siempre. Por aquel entonces vivía en casa de mi madre,en la calle lagasca. Mis primeras acciones siempre son lentas,sin cálculo ni medida,es como si el tiempo pasase mas despacio,por eso llego tarde a casi todos los sitios,cuando se trata de una cita mañanera.


Movía el colacao con parsimonia,la cuchara ,a veces me mira y vosteza.Ahora tomo café,la cuchara lleva gafas.


En aquellos tiempos tenía un ritual,absolutamente necesario para salir a la calle con el mínimo criterio,me refiero a la imagen,esa que es tan fundamental hoy.Que pena.


Tenía una silla a mi izquierda,bueno a mi izquierda cuando me daba la vuelta hacia ese lado en la cama,si me la daba al revés la silla estaba a la derecha,pero lo que quiero decir es que la silla estaba al lado de la cama.


En esa silla de madera con una tela de respaldo,a modo silla de director de cine de hollywood,yo dejaba la ropa perfectamente colocada para que al llegar la mañana no tuviera que dar vueltas sin rumbo buscando gallumbos o camisas.


Era habitual verme con el armario abierto,mirando a sus profundidades con los ojos cerrados.


Aquella noche nuestra madre nos insistió en la vestimenta de la mañana siguiente,fue bastante pesada conmigo,ya que césar siempre iba de camisas y pantalones de los guapitos.


La cita era importante.


Yo preparé una camisa ,un pantalón y una chaqueta. Dos calcetines y unos gallumbos. La corbata no llegó a piskuetolandia hasta bien entrado el siglo XXI.


Alzo mi mano,palpo la ropa. Extiendo mi mano,cojo los gallumbos,me los pongo. Alargo la mano,me doy con la silla,cojo los pantalones,me los pongo,me recuesto y abro los ojos. Desde el fondo del pasillo se oye.."vamos hijo ¡¡¡...te vas a duchar?.


Yo se que es imposible ducharme con tanto estress,la ducha debe de ser motivo de relajación,la limpieza es para los limpios, en mi país nunca nos duchamos nerviosos,preferimos el "sovaking".(poner el baño perdido de agua al lanzarla contra los sobacos después de aplicar jabón en la zona).Menos aseado pero mas rápido.


También practico el "cabezing".Agacharse,doblarse y reclinarse en el baño,cual decapitado en guillotina,para aplicar agua en la cabellera con la ducha en la mano,este acto lo voy a suprimir por que se tarda lo mismo que al ducharse.


Los guevos me los labo cuando me ducho por que mis rodillas chillan mucho en el vidé y me salen bultos.



Una vez vestido, aseado,afeitado y desayunado me dispongo a salir de casa hacia el evento tan importante.


César viene conmigo, mi madre y Feliciano.


Mi hermano es mucho mas recto,le queda mejor el traje,él parece alguien,por que tiene estilo.


En aquel tiempo solo parecía.


Nos metemos en el coche y nos ponemos rumbo al banco ese donde nos esperaba esos tipos tan elegantes,entre ellos el notario.


Entramos en un hall enorme,ascensor y no recuerdo cuantos pisos.


Nos hacen esperar,mi madre estaba nerviosa,tensa,el ambiente enrarecido.


Salen a recibirnos los tipos disfrazados. Todos con mucha colonia,gomina,al estilo de la época,como Mario Conde.Impolutos,trajes italianos o similar,ni una arruga en la camisa,aunque sea bella.


Yo les veo y pienso estos no han hecho "sovaking" , no lo visualizo,no les veo haciéndolo,estos "san duchao".


Se acercan y nos indican el camino de la sala de juntas.Todo muy ceremonioso.Nos saludan,nos dan la mano y sonrien con un gesto de esos de medio lado.


Esperamos al notario.


Llega el notario,todos se ponen en pie y le damos la mano uno a uno.


Yo noto algo raro en mi manga pero le doy la mano igual,por que mi madre me enseñó a no despreciar una mano extendida.


Después del acto de saludos varios,nos sentamos.


Miro a mi hermano y me empieza a dar la risa.Todo eso era demasiado serio para mi.


El bulto de mi manga se convierte en molestia, decido investigar,meto mi mano derecha en mi manga izquierda o al revés,no me acuerdo.


Como si fuera un mago con el truco de los pañuelos,saco un calcetín negro. El mismo que no encontraba en la silla.


El "calceto" colgaba ligeramente de la manga de la chaqueta,pero como también era oscura no se notaba mucho,bueno ese fue mi consuelo.


Debí dejar los calcetines puestos en uno de los lados de la silla,a modo de gorro de pitufo o de bandera,al poner la chaqueta encima y luego quitarla,se debió meter en la manga.


Imaginaros lo que tuve que contenerme para no estallar allí mismo de la risa


Candelitas hija, me mira con los ojos de su madre,esos que ponía cuando no podía echarnos la bronca delante de la gente.


Yo le enseño el calcetín por debajo de la mesa.


Mi hermano pone cara de poker,yo me doy mus.


A ver donde me los meto ahora antes de que termine esto y todos se pongan a saludar otra vez.


El notario me mira y me pregunta no se que de mi nombre, yo le oía como en las pelis estas que están describiendo lo que piensas y se mueve la boca lentamente pero no se oye nada.


Al final escondo el calcetín y tiro "palante".


Al salir mi madre empieza a "descojonarse", no se si por risa nerviosa o por la situación: "como puedes ser tan ganso,Juan?", pero "de donde has sacado eso?".Mi hermano no daba crédito y eso que estábamos en un banco.


Este día pasó a la pequeña historia familiar, sellado por mi despiste que no fue casual,es una determinante en mi vida.




Se os quiere.